El mercado inmobiliario español sigue viviendo un giro en su historia, esta vez con el precio de los alquileres. Según diferentes informaciones los contratos crecieron notoriamente en el último año, y muchas ciudades españolas registraron los precios más altos de su historia. Esto se debe a un fuerte aumento de la demanda, pero también al descenso de la oferta. Ya que debido a la crisis, muchos de los propietarios estando ahora en un mejor momento económico han decidido optar por una venta y no por un alquiler. A esto, también se le suma el nuevo boom de alquiler a turistas, subiendo así los precios de los alquileres de larga duración
En seis ciudades del estado Español (Barcelona, Las Palmas, Palma, Madrid, San Sebastián y Girona), los alquileres son más elevados que hace una década. Pero esto no es todo, según el apartado de alquiler de vivienda del IPC que publica el Instituto Nacional de Estadística los precios en casi todas provincias son superiores a los de 2007, de entre ellas en las provincias más pobladas. Según parece muchos de los propietarios tenían los pisos en alquiler con precios bajos durante la crisis, ante la negativa a vender por la bajada de precios, pero ahora que la economía se ha reactivado desean aprovechar la situación para vender y no para seguir alquilando.
También influye en todo este proceso la aparición de los pisos turísticos, según diferentes informes influye notoriamente, ya que en muchas de las ciudades estos ocupan gran parte de entre todos los pisos de alquiler de la misma. A pesar de que patronales e inmobiliarias niegan el efecto y exponen que el verdadero problema lo ocasiones todas las viviendas vacías que hay y que no salen al mercado.
Pero sin embargo, muchos de los propietarios de pisos que han alquilado su piso en webs y apps turísticas indican que obtuvieron más ingresos que al arrendarla a inquilinos de larga duración, ya que según estudios, en Madrid por ejemplo en un piso turístico con aproximadamente 20 noches al mes sale más rentable que con inquilinos de larga duración, siendo en Barcelona este numero todavía más bajo, de 15 noches al mes.